Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

viernes, 21 de mayo de 2010

Sones para leer a Miguel Hernández


Sones para leer a Miguel Hernández
Rafa Lorenzo, Miguel Ángel Caballero y Juan Taboada homenajean al poeta de Orihuela en el teatro Filarmónica

Rafa Lorenzo, durante su actuación de ayer por la mañana en el teatro Filarmónica. miki lópez

D. ORIHUELA

Los poemas de Miguel Hernández llevan décadas poniendo los pelos de punta a millones de lectores, y ayer la magia de la poesía volvió a producirse en el teatro Filarmónica, y por partida doble, a las doce y media y a las ocho de la tarde. El cantautor Rafa Lorenzo y el declamador Miguel Ángel Caballero fueron las voces que hicieron viajar hasta Oviedo al poeta de Orihuela en el centenario de su nacimiento.

El acto, organizado por la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Oviedo, cumplió un doble objetivo, el de recordar a uno de los grandes de la poesía española, fallecido prematuramente en la cárcel por una tuberculosis de la que enfermó en la Guerra Civil, y el de lograr que los niños de los colegios ovetenses conociesen su obra fuera de las aulas.

Al acto dedicado a los escolares acudieron 638 alumnos y alumnas de cuarto curso de Secundaria y primero de Bachillerato de los centros educativos de Inmaculada, Monte Naranco, Loyola, Santa María del Naranco, Pérez de Ayala, Pando y Doctor Fleming.

Durante una hora Rafa Lorenzo y Miguel Ángel Caballero fueron soltando las perlas que dejó escritas Hernández.

El cantautor puso las primeras notas a «Las desiertas abarcas», pieza en la que el poeta se lamenta de la ausencia de regalos la noche de Reyes. Un canto a la ruralidad mediterránea muy propio de Hernández, y que Lorenzo utilizó, con el guiño de la magia de los Reyes Magos, para iniciar a los niños en una andadura musical por la poesía.

Miguel Ángel Caballero, con voz grave y taimada, con una entonación perfecta, no dejó pasar otro de los poemas más conocidos de la obra del de Orihuela, las «Nanas de la cebolla». Por el escenario desfilaron fragmentos de «El rayo que no cesa» o «Poemas últimos».

Todo acompañado de la música seleccionada por Juan Taboada y con un olivo y una cartel con el rostro del poeta, como única decoración de un teatro repleto de futuros lectores de poesía.